
Todo lo que hacía mi mundo carecía de un saber.
Simplemente me senté un día acá y alguien importante para mí, me felicitó.
Y eso bastó para hacerme comprender que mi mundo no carece de saber.
Mi mundo, tenía un destino previsto.
A cada cosa. Su tiempete.
Simplemente me senté un día acá y alguien importante para mí, me felicitó.
Y eso bastó para hacerme comprender que mi mundo no carece de saber.
Mi mundo, tenía un destino previsto.
A cada cosa. Su tiempete.
No hay comentarios:
Publicar un comentario